miércoles, 23 de diciembre de 2009

"¿Dónde te metes?"



Postal que nos regala Myriam (Una explosión creativa que arremete contra molinos de viento)

Cuando llega el final del año (eso si aceptamos nuestro calendario, a pesar de que nunca nos cierren las cuentas) tendemos a hacer balance y proporneros objetivos. Como eso ya lo hago en el curro y con números de verdad, y como no me creo mucho los finales impuestos, prefiero orientarme por el deseo.Es el único motor que sé engrasar a tiempo.

 
Hace un tiempo que estoy alejada de este espacio. Concretamente, 2 meses. A mí me parece mucho más, ya que con lo que llamamos "mundo virtual" pasa como con lo que hemos dado en llamar la "ficción": ordena el caos de la realidad, da un sentido al sensentido que es vivir, crea sensación de cercanía en la distancia y multiplica las posibilidades de acción.

Pero - a veces pasa - el mundo de lo concreto me solicitó a su vera, y allí estoy. Mucho trabajo, muchos desafíos, muchos nuevos caminos en los que tuve que descifrar las señales. Las pocas horas que se salen de esta concreción las he dedicado a escribir cosas no publicables (todavía).

Cada vez que abría el blog me quedaba mirando la pantalla unos segundos, apagaba el ordenador y me sentaba frente al fuego. El deseo me llevaba hacia otro lugar. Y, como no hay nada mejor con los cambios que poder disfrutarlos, en eso estoy.


He pensado en cerrar el blog, pero sería como matar a quien ya no deseas. Y creo que todavía tengo aceite para este engranaje.

Lo peor cuando te vas es que te cuesta volver. Sientes a la vez que tienes mucho y nada por decir. Pero, como soy muy perseverante, seguiré intentando alimentar este espacio. Quizás con otros colores. Seguramente desde otro lugar. Y con mucho deseo. Si no, espero no dejarlo morir, y darle el tiro de gracia que se merece...

1 comentario:

Pat dijo...

yo espero que no lo dejes...
aunque me he sentido muy identificada con lo que comentas... soy especialista en dejar entradas a medias...

un abrazo