lunes, 30 de mayo de 2011

La spanish revolution desde la rabia de una sudaka de mierda

hace días que suspendo comentarios sobre la spanish revolution por temor a que mi desconfianza sea producto de mi vejez.
Los primeros días fue una explosión: tenía la sensación de haber estado esperando este momento todo mi vida: la gente okupando el espacio público, autogestionándose, asambleando, mezclándose, sonriendo en lugar de ir con caras de arenque ahumado. Esta explosión de expresión, de debate, de asamblerismo, me conmovió y emocionó.
Participé en las asambleas de comisiones y las generales desde el respeto y la escucha, ya que consideré que yo tengo ya canales de expresión (porque me los invento cada día, no porque mi voz sea considerada digna de ser escuchada), y me pareció que lo realmente democrático era escuchar a quienes nunca hablan, nunca se manifiestan, nunca debaten. Me apunté a la subcomisión de cultura de la comisión de contenidos, con la esperanza de aportar mi granito de arena en un grupo más reducido y concreto, para evitar la dispersión y en busca de confraternizar con semejantes. Pero tuve que dejar de participar al plantearse asambleas diarias a las 7 de la tarde, ante mi perplejidad por una propuesta tan poco sostenible a largo plazo. Intenté participar en la subcomisión virtualmente, pero mi propuesta de establecer ese canal resultó inviable por el temor de de que la gente dejara de participar en las asambleas y lo hiciera única y relajadamente (¿no era esta la #spanishrevolution?) desde sus casas. Así que me dediqué a participar virtualmente como informadora.
Seguí las asambleas generales via streaming, y me asusté ante el curso que tomaban las propuestas, como la de pedir la prohibición a los paquis (devenidos paquistaníes en ese arranque políticamente correcto que todo lo invade) de vender cervezas dentro de la plaza (atención: las acampadas no son un botellón, eso está claro, lo que es oscuro es que la prohibición -desde lo políticamente correcto- suplante a la responsabilidad. ¿Por qué no establecer un espacio en el que no se aceptan conductas agresivas en lugar de asumir que quienes consumen alcohol no son nunca responsables de sus actos? ¿Por qué repetir las dinámicas del papá Estado que todo lo prohibe en aras del "bien público"?). Pero la posición que consiguió sacarme de las casilla fue la de que "la policía tmabién son personas / la policía es nuestra amiga". Como bien dijo mi amigo Enric, la policia es un cuerpo, no son personas, y como bien sabemos quienes hemos soportado su violencia brutal, cuando ese cuerpo obedece órdenes lo último que debes hacer es ofrecerles tu otra mejilla. Y lo que más me dolió de ese discurso pacifista era que, si hay que ser pacifista cuando viene la policía para que no nos pegue, eso significa que a quienes nos han pegado (y arrancado ojos con balas de goma, y roto piernas y brazos, y encerrado y torturado en calabozos, y procesado por delitos que no cometimos, y sentenciado en procesos judiciales fraudulentos y condenado por lo que no hicimos, y no sigo pork reventaré el teclado) ha sido porque habíamos actuado violentamente, porque la policía había tenido que actuar ante nuestra violencia, porque nos lo merecíamos, en fin. "Algo habrá hecho", decía mucha gente en Argentina cuando se enteraba que habían desaparecido a su vecina preñada de ocho meses para violarla, robarle la criatura y arrojarla a ella al mar. A pesar de todo, confié en todo momento que esta explosión adquiriría nuevas fuerzas cuando se trasladara a los barrios, que es lo que está pasando ahora y el mejor camino que veo hacia transformaciones reales.
Desafortunadamente, el brutal ataque de los Mossos el viernes vino a confirmar nuestros temores. Y la gente volvió a salir a la calle en masa: otra vez la okupación, la autogestión, la respuesta a la brutalidad. Para quienes siempre nos hemos sentido atacados no sólo por la policía sino por la indiferencia de la gente ante su brutalidad, no ha sido una novedad. Los Mossos, cuando pegan, es así como lo hacen. El que lo hagan a pacifistas o a okupas no cambia el dolor del golpe. Pero esta vez, la gente en masa salió a condenar el ataque, y eso emociona.  
El viernes por la mañana viajé a Madrid y tuve la oportunidad de participar en la acampada de Sol. En la asamblea general del sábado escuché una propuesta que me hizo levantar el culo del suelo y alejarlo de la plaza: la comisión de espiritualidad pedía que, en aras de una educación de todas las religiones en las escuelas, se eliminara el adjetivo "laica" del reclamo "por una educación pública, laica y gratuita". No me extenderé sobre el porqué de mi espanto, simplemente decir que en un país en donde la iglesia católica tiene (casi) más poder que el Estado, no hace falta ser Einstein para medir los peligros de este reclamo. Lo mejor de la asamblea: el chico que la moderaba. Chapó. Emocionante que alguien sea capaz de coordinar a miles de personas con alegría y sensatez.
Lo mejor que viví en Sol: la charla drag king dada por M en conflicto en la carpa feminista. Así, otra vez entre semejantes, otra vez el guetto, otra vez el pequeño grupo, pero esta vez en la calle, en la Puerta del Sol, abiertas a que cualquier persona que pasara se acercara a participar, a escuchar y decir lo que nunca pueden escuchar ni decir.
Y así me siento: una de cal y otra de arena. Emoción y empuje por un lado, desconfianza y tristeza por otro. Ayer leí una pequeña editorial del catedrático e investigador Daniel Innerarity (Bilbao, 1959, escritor de El futuro y sus enemigos: una defensa de la esperanza política) publicada en el suplemento Babelia de El País. Reproduzco unos párrafos que suscribo:

"La indignación es una virtud cívica necesaria pero insuficiente.(...) Indignación hay en todas partes (...) Indignados están, por ejmeplo, los que creen que el Estado de bienestar disminuye pero también los que consideran que está yendo demasiado lejos, los que piensan que ya hay demasiados extranjeros, los fanáticos de todo tipo, aquellos cuyo miedo ha sido agitado por quienes aspiran a gestionarlo.
Nuestras sociedades están llenas de gente que está "en contra" y escasean los que están "a favor" de algo concreto e identificable. El problema es cómo nos enfrentamos al hecho de que lo que moviliza son energías negativas de indignación, afectación y victimización. Es lo que Pierre Rosanvallon ha denominado como "era de la política negativa", en la que quienes rechaznn no lo hacen a la manera de los antiguos rebeldes o disidentes, ya que su actitud no diseña ningún horizonte deseable, ningún programa de acción. En este panorama, el problema es cómo distinguir la cólera regresiva de la indignación justa y poner esta última al servicio de movimientos con eficacia transformadora".


Y para posicionarme claramente: yo estoy a favor de la autogestión, el cooperativismo, la creación colectiva, la sexualidad libre, el definir a las personas por sus actos y no por sus credenciales identitarias, de la lucha y la responsabilidad cotidiana en el hacer (no sólo cuando me miran, no para quedar bien, sino porque nuestros actos tienen consecuencias). Y no estoy indignada porque no soy yo quien define qué es digno, pero sí estoy rabiosa desde que tengo uso de razón: rabia contra el poder dictatorial, rabia contra la guerra, rabia contra el abuso, rabia contra la violencia armada del Estado, rabia contra la discriminación, rabia contra el appartheid, la homofobia y todas las fobias, rabia contra el nacionalismo que impone fronteras y pasaportes, rabia contra la normalidad que anula las diferencias y nos señala con dedo acusador, rabia contra los poderes y personas que hacen de la miseria un negocio, rabia contra la privatización de los recursos naturales y contra la exterminación de todos los "obstáculos" humanos y no humanos que dificultan el enriquecimiento de algunos pocos.

Creo que quienes hace mucho nos dedicamos a este absurdo trajin de "hacer la revolución" no debemos caer en la tentación de suspender nuestras vidas para estar en la plaza. He anulado talleres y presentaciones, postergado la creación de una cooperativa de consumo y dejado de lado la organización de jornadas porque "ahora no es el momento". La pregunta es: ¿pues entonces cuándo?
Celebro que mucha gente haya por fin abierto los ojos a la injusticia: esto tenía que pasar. Ahora toca que al abrirlos vean que el cambio es complejo y tortuoso, que la lucha es cotidiana y permanente, que es en lo local en donde podemos crear otras redes de producción y consumo, otras formas de pensar y de actuar, que la masa es acrítica per se, que no podemos irnos a vivir a las plazas para siempre, y, sobre todo, que no habría que volver a empezar de cero en cada generación.
Y acabo con estos versos de la Princesa Inca como advertencia del peligro de los extremos:
Hay ojos que son ciegos viéndolo todo, 
luego existen ojos que lo ven todo y acaban cegándose.  

***

os invito a leer este excelente artículo de un vento ben via maribohleras: 
http://maribolheras.com/?p=1584

11 comentarios:

Sr.Vallejo dijo...

No entiendo porque salistes de plaza del sol, o porque te ofendes ante una propuesta.

Yo también estoy en contra de que la educación no sea laica (si alguien quiere enseñar religión, que lo haga en su casa) pero eso no quiere decir que nos tengamos que cerrar en banda y si oímos algo que no nos gusta desmarcarnos del movimiento. Lo que más me gusta de este movimiento es que todos podemos salir y proponer, tengas las ideas que tengas, y que estas ideas serán debatidas y votadas.

Sobre lo de que los policías son personas, no veo nada malo. Obviamente que hay muchos que habría que cerrarlos y tirar la llave, sobretodo los jefes, que no solo permiten la brutalidad, si no que lo promueven.

La policía es brutal, pero no se combate con más brutalidad. El pasado viernes se consiguió una victoria contra esta brutalidad, y de una forma pacifica. Igual que el sábado, demostrando que pacíficamente pudimos controlar a los violentos que celebraban la victoria del barça.

Como ya he dicho unas lineas más arriba, lo mejor de la spanish revolution es que todos tenemos voz. Y que todas las ideas son validas para ser comentadas, debatidas, y aprobadas o denegadas.

mono magnético azul dijo...

llevaba tiempo esperando esta entrada
lo necesitaba
gracias helen

HelenLaFloresta dijo...

Sr. Vallejo, antes que nada, gracias por tu comentario. de eso se trata, de comentar y debatir

No me estoy desmarcando del movimiento, sobre todo porque lo bueno que tiene este movimiento es q no tiene marco. Estoy planteando mis dudas así como mi emoción ante la explosión de rabia de la gente.
Apunto hacia dónde me gustaría que apuntara este movimiento para q no se muera de éxito, para conseguir transformaciones radicales con toda esta energía.
Mucha gente ha muerto en este país y mucho se ha luchado por una educación laica. Me parece un retroceso peligroso pedir educación religiosa, cosa que ademas ya se está haciendo (en las escuelas públicas hay las asignaturas de educación católica y de "religión", que se refiere a las otras religiones.
por eso invito a reflexionar, a hacerse preguntas, a no dejarse ahogar por este tsunami.

la policía es un cuerpo, y así me refiero en el post. Luego, hay gente que trabaja de policía: esas son personas, y las hay afortunadamente de todo tipo, inclusive un servicio especial de los Mossos (mosses, en este caso)especializado en homofobia y transfobia, a quienes respeto muchísimo. Pero un cuerpo de policía es uno de los brazos armados del Estado, y será brutal si así se lo ordenan.
en ningún sitio digo k la respuesta a esa violencia es la brutalidad. leí x ahí que, de las 36 posibilidades, la mejor es escapar. y así lo he hecho siempre k he podido,aunk eso no me ahorró porrazos, detenciones, golpes de caballo y gases lacrimógenos. nunca he tirado piedras ni quemado contenederos, pero jamás se me ocurriría dar una flor o levantar los brazos a un enceguecido "agente del orden", así como tampoco lo incluiría como táctica en ningún manual de activismo

lo de viernes es muy diferente de lo del sabado, y así lo explico: una es la ingenuidad q llevo a la indefensión total, lo otro es una respuesta multitudinaria de repudio a la violencia de Estado.

por último, no me ofendo ante una propuesta, e invito al debate- por eso este post, por eso sigo luchando. pero luchar no es estar de acuerdo en todo, sino buscar objetivos comunes, planificar estrategias y actuar en consecuencia

ese es mi parecer, al menos. y otro pequeño apunte: no me fui de la plaza, "levante el culo" es literalmente k salí de la asamblea y me fui a la carpa feminista

Laietti dijo...

Llevo un buen rato pensando qué añadir a tu magnífico análisis. Salvo la diferencia de que yo he vivido el movimiento siempre desde Madrid, ante tu descripción me he sentido realmente representada. Y no sólo en la parte de la asamblea en Sol, donde estoy de acuerdo en que el moderador estuvo impresionante. En la propuesta de escuela laica, creo que al final volvió a bajarse a comisiones. Aunque se recalcó que "laica" no quería decir que no se pudiera aprender historia de la religión. A mí me descolocó más una propuesta que salió de consolidarnos como partido político (¿?¿?)

A parte de esto, sólo quiero aportar un sueño que tuve el viernes por la noche, después de vivir la concentración en Sol en solidaridad con los desalojos de Barcelona (y aunque menos recordados, también los de Lleida y Badalona). En mi sueño, que fue una verdadera pesadilla, el chico que estaba grave acababa muriendo. Y yo estaba en Sol, rodeada de miles de personas con flores en las manos, con los brazos en alto, que seguían gritando "Barcelona no llores, te traemos flores".

Creo que no tengo más que decir.


Bueno sí: gracias. Por describir mucho mejor de lo que podría haber hecho yo, lo que ha estado pasando por mi mente todos estos días.

HelenLaFloresta dijo...

como bien dice el comunicado de detenidxs de la mani del 15M: "si luchas puedes perder, pero si no luchas estás perdida"

gracias helio i laietti x compartir mis temores, así igual se transforman en acción real (ahora k lo real está de moda, aunk real me recuerda a realeza y a realidad, k es rugosa y amarga... los adjetivos es lo k tienen: son fácilmente manipulables. por eso prefiero los verbos)

alba dijo...

Helen, totalmente de acuerdo con la entrada, en todos los aspectos. A veces me dan ganas de salir pitando de plaça catalunya.
Sobre la venta de alcohol: sorprendente que nadie se haya referido aún al concepto responsabilidad. ¿se considera legítimo/a y responsable a todo cerebro presente para decidir un sí o un no sobre cualqueir cosa, pero no se le considera con responsabilidad suficiente como para beber o fumar lo que le dé la gana sin caer redondo al suelo?
Sobre las palabras: ni comento el lenguaje usado por la mayoría, excluyente en todos los casos, porque me pongo frenética. No se puede quere cambiar el sistema sin esforzarse en corregirse primero a una misma. Hasta el género femenino se autodenomina "nosotros". AAAAAARRGGHHH!! Pero en fin, que no es eso. No me gusta tampoco el concepto "la plaza es nuestra" ¿n u e s t r a??? no era que luchábamos contra las posesiones de unas pocas??? la plaza, que yo sepa, es de toda persona que quiera usarla.
Sobre de los lemas, de las propuestas de acción, etc. mil de cosas a opinar y debatir. Pero todo se andará.
Salú!

slavina dijo...

te quiero, sudaka de mierda.

tu spaghettona, desde la politicamente incorrecta Palermo

clàudia dijo...

helen comparto bastante las mismas sensaciones en barna...

io tb me pregunto si este parón en nuestra vida cotidiana (de las ke ia llevamos tiempo haciendo "la revolucion") es positivo o no... Conclusión ... io almenos seguiré por la plaza porke no me puedo salir de ella.. pero ke no nos despisten....mhh

por cierto aki uns observaciones sobre acampadasol ke no tiene desperdicio, en este blog :

http://nomoriridiota.blogspot.com/2011/05/acampadasol-que-ha-sido-realmente.html

firmado... clàudia (la del domingo en el parke extraradio de la plaza con carlos i marta)

saludikos

twitter.com/claudxxxa

Anónimo dijo...

Estoy de acuerdo con el post y tengo que decir que en un principio aporte sugerencias a la acampadacoruna y no se por que razón dejé de tener la posibilidad de iniciar propuestas en el grupo de facebook. Solo podia comentar opiniones pero no abrir un hilo.
Si esa es la democracia que persiguen, que no cuenten conmigo. Y destacar que yo también me indigné cuando oí que la policia era nuestra amiga. Apaga y vamonos.

paroledequeer dijo...

guapx, excelente reflexión...totalmente de acuerdo...a ver si nos vemos prontito...besicxs desde Alacant city

HelenLaFloresta dijo...

en Sant Cugat (sankagat, k le decimos) también hay acampada. El lema es: "Amor, Fe y Compromiso".

5 (sincomentarios)

la democracia real es la que tenemos. me suena como al "socialismo real" que distinguíamos del "socialismo soviético". el primero era el k molaba y perseguíamos, pero no existía, y el que existía era una dictadura. en fin, ya cometí ese error, y sólo porque era adolescente.

paroles de queer, venirvos a valencia este finde!

clàudia, la revolució és justament la que fem a l'extra-ràdio... mua!